La letra de hoy es de la comparsa ‘La eternidad’, de cuya página de facebook la hemos sacado.
Cádiz es esa ciudad
donde cada semana
camina una procesión,
esa que va por dentro.
La memoria de los pasos
buscándose por la playa.
La piedra donde tropiezan
y donde descansan los vivos y los muertos.
Donde la izquierda vela por su derecha.
Donde el mediocre siempre gana al talento.
La que baja sus pantalones
a un turismo que le impone playa y luz
pero a las doce, silencio.
Es el martillo del levante, no obstante
la ahuyenta de sus fantasmas.
Carne de gato en los bloques de su alma.
Los barrotes de la cárcel
de los dos alcaldes de su libertad.
Es el flamenco esmoresío
buscando su trono perdío,
una lunita cambemba arañando la bahía.
La que receta carnavales
y nadie le cura sus males,
la que nunca verá el AVE
que su tren lo perdió un día.
El bombo eterno, el paro eterno,
esa humedad doblando un cuerpo
que no sabe dónde va.
Cádiz es la ciudad de los ojitos desahuciaos
del corazón prejubilao
de tanto tragarse su mar.
Este es el piropo más triste
que yo te haya escrito en mi vía
pero tú haces el milagro
de que termine llorando
por alegrías, por ale
grías, por alegrías.
Antonio Martínez Ares
‘La eternidad’ – 2017