Empieza en Cai una batalla de cantes.
Vencerá quién más profunda su lanza clave.
Las gargantas cortan que matan.
Todos quieren la Taza de Plata.
Y las ballestas silban miles de estribillos,
corre la sangre como corren los papelillos,
van rodando cabezas de pretendientes,
una guerra de años, de siempre.
Y los tangos pelean sobre la orillita de la playa.
Cinco caballeros miran la lucha desde las murallas.
Tras de ella sólo se escuchan llantos,
muchos reinos heridos se van llorando,
cuatro feudos plantan sus banderas
y golpean sus escudos en la arena.
Las espadas se saludan,
los corceles se encabritan,
una flecha cruza el viento,
es la señal que necesitan,
unos dicen que es la muerte,
los demás le participan,
y sólo uno tendrá el premio
de la reina, de la reina,
de la reina más bonita.
Por un solo momento
tres guerreros han rozao la gloria,
derrotaos de rodillas, sin vida,
ya son parte de la historia.
¡Ay!, Tacita, doncellita de los mares,
lo que tú guardas tan sólo Dios lo sabe,
que por un cariñito nos destrozamos
y por tus besos,
¡ay, por tus besos!
nos matamos.
* * *
Antonio Martínez Ares
Los templarios, 1999
Letra con modificaciones de Guitarra de Gades