Hay que ver, qué suerte tengo
otra vez salgo en la tele
porque están retransmitiendo
en directo la final.
A ver si me coge entero
que me está viendo mi mare
y ha comprao un vídeo nuevo
porque me quiere grabar.
Otra vez está aquí la tele
imponiéndonos sus leyes,
unas leyes que, sin duda,
habrá que aceptar:
fuera los decoraos
que limitan el tiempo,
que ellos son los que mandan
y tenemos que tragar.
Y para que esto empiece
como unos niños buenos
hay que esperar que acabe
el programa nacional.
Ya está bien de quedarse
con to los gaditanos,
ya está bien de ofrecernos
todas esas falsas promesas
que luego quedan en na.
No queremos limosnas,
tenemos nuestro orgullo,
quiero que se transmita
íntegra toa la final.
En nuestros carnavales
nada es imprescindible
y menos una tele
que no entiende esta afición.
Si siguen de esta forma
ya podéis coger los tiestos
y pirarse con sus cuentos
que tendremos carnavales
quiera o no televisión.
Francisco Abeijón Ramos y José Martínez González
‘El crimen del mes de mayo’ – 1989