Que llueva, que llueva
cuanto quiera llover
Virgencita de las cuevas,
dame un poco más de sed
que al gaditano que canta
se le seca la garganta
que sí, que no
y otro chaparrón
a puntito de caer.
Que llueva, que llueva
cuanto quiera llover
lluvia limpia, lluvia nueva
que haga a Cádiz florecer
pero no que la marchite
ni me la desilusione
ni la tengas ahogaíta
soportando chaparrones
que pa chaparrón ya tiene
los piropos que le llueve
en carnavales.
Que aquí todo vale paisano
que a Cai le llueve de to
seguimos con el non plus ultra
que traducido resulta:
la mare que me parió,
la mare que me parió.
Y si solo te lloviera,
Cádiz, coplas y penitas
pasaría los chaparrones
a tu verita
y hago tuyo, y hago tuyo
y hago tuyo mi paraguas, Tacita.
Que llueva, que llueva
cuanto quiera llover
Virgencita de las cuevas,
dame un poco más de sed.
Que llueva, que llueva
cuanto quiera llover
Virgencita de las cuevas,
dame un poco más de sed.
Que llueva, que llueva
cuanto quiera llover
y hago tuyo mi paraguas, Tacita.
Joaquín Quiñones Madera y Juan Manuel Romero Bey
‘El chaparrón’ – 2012