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Este sistema nos deja vendidos
sin pactos firmes por la educación,
no sé en qué piensan tantos entendíos
pero en los menores seguro que no.
Privatizando la escuela de siempre,
privatizando la administración,
sólo nos salvan los y las docentes
que a pesar de todo siempre lo dan to.
Las que me motivarán,
los que por mí lucharán
y aceptarán el apoyo de un padre,
las que se emocionarán
amando su profesión
con los cuidados que te da una madre.
Los que se someterán
al cupo de la opinión
y hasta reciban alguna agresión.
Se los toman a cachondeo
y los entierran con el papeleo.
Basta de ningunearlos,
de insultarlos y venderos,
hoy pido respeto para las maestras,
para los maestros.
David Amaya Jiménez y Diego Fariñas Baro
‘Los gallitanos’ – 2024