Bajé de la muralla y ahora vivo por los bloques,
Dios mío, esto es un disloque
no existe más libertad.
Bajé de la muralla y ahora tengo por hogar
las pieras de un rompeolas
que cuida mi caracola
de los besos de la mar.
El sol es mi dueño,
la luna es mi sueño,
no tengo otro empeño
que arañar por mi ciudad,
el mar mi tesoro,
mis bloques oro,
me cachi en los moros,
quién los puede remediar,
cómo te quiero, cómo te quiero
ay, Cai, cuánto te quiero
que no hay quien te quiera más.
Miau, que me tiene loco tu nochecita,
miau, viendo cómo guiñan las estrellitas.
Loco en tus amaneceres,
suenan a gloria bendita,
que son como cascabeles
cuando se despiertan tus campanitas.
En mi mundo de lujo
rodeado de basura
desperdicios de algunos
pa entregarnos la locura
soy la envidia de muchos
pues tengo una eternidad.
Son siete vidas
pa quererte, pa enamorarte,
pa estar a tu vera,
siete para defenderte
me tienes pa lo que quieras.
Que por Cai este gato,
que por Cai este gato
da sus siete vidas enteras.
Antonio Rivas Cabañas y Julio Pardo Merelo
‘Por los bloques’ – 2005