Ay, qué locura de día,
del Día vengo corriendo,
corriendo pa la cocina,
cocinando siempre,
siempre para ellos.
Ellos son mi madre,
mi marido y mis dos niños.
Niño, a ver si tratas
a tu hermano chico con cariño.
“Cariño, me planchas la camisa, por favor”.
Por favor, decidme a mí
si es vida lo que llevo yo.
Yo soy un ama de casa,
cásate luego qué pasa,
pasa que termino molía,
líate a limpiarlo todo,
todo el marrón me lo como,
como que encima le ponen falta y ya estoy hundía.
Un día y otro día y otro con lo mismo,
lo mismo me vuelvo loca,
lo que hace una sin cobrar
cobrando otros lo que cobran.
Cobrar un sueldo es lo que pedimos,
dimos y seguimos dando el callo con sudores,
sudores que valen muchos millones,
de millones de mujeres,
mujeres con dos cojones.
La agrupación
‘Ojú, ya saltó el levante’ – 2002