Ley del mar es la ley del marino
y es su reino su propio navío,
ley del mar tu bandera y tu sino,
no se esconde por miedo al destino,
ley del mar es la ley de sus hijos
que en el mar han nacido y vivido,
tempestad une a tal pueblo unido
encallado en la mar.
Ley del mar socorre al marino
que en la mar va sin rumbo y perdido,
es la Niña Bonita el navío,
la esperanza, el rumbo, el camino,
no me busques bandera ni sino,
soy un sueño que nunca ha existido,
soy el cabo, el timón y el estribo
que te viene a salvar.
Cuentan los del mar
que fue Cádiz galeón de libertad
y que supo en batalla
pelear por los demás.
Capitana del mar,
golpeada y atacada sin cesar,
que su flota y su armada
la dejó zozobrar.
En guardia de engaño y miseria,
tempestad del mar que la asedia,
desplegad con fuerza sus velas
que no hay quien pueda
con nuestra voluntad
arrimad el hombre en cubierta
realizad, futuro en su tierra
tempestad, la niña bonita
que necesita Cádiz pa navegar.
Aquí están de la mar estos hijos
que en la Niña Bonita han venido
a sacarte del mar del olvido
donde estás atrapá.
Si en la tierra su ley no ha servido
la que el mar ha grabado y escrito
es la ley de la fuerza y el grito
la que marca otro rumbo y destino.
No hay ataque pirata ni enemigo
que te dañe si estamos unidos,
que la niña bonita ha venido
con sus leyes del mar,
con sus leyes del mar.
—
Rafael Pastrana Guillén
‘La niña bonita’ – 2015