Ahora vas a callarte,
guarda silencio,
será nuestro secreto,
soy tu papá
y mientras se produce
la canallada
guarda silencio,
baja la mirada
y una mamá no se quiere enterar
y sigue en sus quehaceres
como ignorante
t sigue hacia delante
sin denunciar.
El silencio lentamente
va pudriendo a un inocente,
da cobijo a un criminal.
Los medios también callan
no se escandalizan
mientas que las cifras
son para llorar
y en el parlamento
callan los partidos
porque al fin los niños
no pueden votar.
Ay, y esto no es popular
mas tengo que decirle
mo son solo curas
los que más abusan,
son los más cercanos.
Ay, y el daño es tan brutal
cuando un pequeño aprende
que ha de protegerse
de aquellos que siempre
deberían cuidarlo.
Tan cobarde es el que abusa
como el que se calla
y niega la verdad.
Tanto hablamos por hablar
y callamos lo importante
puede ser que hasta prefieras
que te cambie el tema
porque es aberrante
y así sigas en silencio
tú también silencio
tú también culpable
pues te juro por mis hijos
solo canto aquí verdades
mientras haya un solo niño
sufriendo el abuso
no voy a callarme.
Francisco Javier Díaz Quintana
‘Los buscadores’ – 2019