Esa fábrica cerrada,
esos currantes paraos,
esa ayuda miserable,
esos empresarios locos,
esos sindicatos rotos,
esos líderes cobardes,
y esos puestos de trabajo
a cambio de subvenciones,
esas manifestaciones
y esas huelgas imposibles,
y esa policía dando
como en tiempo de los grises,
esos que no dan la cara
si no es pa salir en la foto,
esos que a Madrid se largan
dejándole el muerto a otro,
esos otros que se esconden
con tal de no dar la cara,
esos que no tienen nombre,
esas promesas que nunca se cumplen,
palabras huecas que no son de nadie,
esos que siguen viviendo en la cumbre
y esos padres familia en la calle,
esas calles que todas van al mar,
ese mar que de noche
se arrodilla en la orilla de sus penas
de esa ciudad con nombre
de mujer que siempre está
maltratada y puteá
ay, qué penita me das
Cádiz de mis entretelas,
Cádiz de mis entretelas.
Antonio Martín García y José Guerrero Roldán
‘Las locuras de Martín Burton’ – 2011