Aunque ya tengo más años
que un disco de Nino Bravo
yo estuve en el Palillero
y me hice un indignado.
Mi parienta me compró
una tienda en Decatlon,
¡una tienda en Decatlon!
Sí joé como la Nuria Bermúdez,
de esas que se abren del tirón.
Y en ella estuve durmiendo,
la tienda era quechúa
porque no veas lo que chúa
cuando le pega el Lorenzo.
Estuvimos más de un mes
demostrando la constancia
pero tengo que decir
que la única ganancia
fue que el Lobe no llegaba
nunca tarde a la farmacia.
Pero callaron las voces,
aunque muchos no lo dicen,
con la forma y las maneras
de cuando estaban los grises,
con la fusta y a caballo
con la fuerza y sin palabras
cuando el pueblo se rebela
son las porras las que hablan.
Y otra vez vuelta al sendero
sin salirse del rebaño
pa que no cambien las cosas
y no tiemblen los escaños.
Dónde están mis libertades
sin bozales ni ataduras,
no me vendáis democracia,
no me vendáis democracia
porque esto es dictadura,
porque esto es dictadura.
* * *
Manuel Álvarez Seda y José Manuel Cornejo
Los puretas del Caribe, 2012
2 comentarios
Salvo que el pueblo sea un carrete fotográfico, no se revela, sino que se rebela
Muchas gracias, llevas toda la razón, ya está corregido.