Recuerdan Sherifila
llegando a Kadi City,
recuerdan las macetas,
que llovieran letras,
no era muy difícil.
Recuerdan los fulares,
la rubia de bote,
cupleses a montones
a su bello rostro
se solían cantar.
José María González,
Kichi, uno de los nuestros,
cinco años ya de gobierno
y le viene ocurriendo
en las coplas algo similar
el Farmatín ahora son las orejas,
que está muy gordo era antes qué fea,
un recurso un tanto pobre
cuando en las gestiones no quieres entrar.
Puede ser que en sus letras
los autores tengan miedo
a hacerle el juego a la derecha
pero si soy de izquierdas
no me complace la complacencia
y si me duele Cádiz
debo hablar de Cádiz
si no, estoy de más.
Si están de pena los buses urbanos,
si el pabellón se nos cae a pedazos,
y admitirlo nos cuesta
si la industria sigue muerta
ay, será un fracaso.
Si hay que seguir invirtiendo en vivienda
que esté al alcance de clases obreras
y si aquí se peca de improvisación
dando más de un bandazo.
Si hoy Cádiz sigue perdiendo a sus hijos
desde hace veinte años
po habrá que cantarlo
porque es la verdad.
Debo recordar mi compromiso,
no me debo ni a un partido
ni me paga ningún credo.
Esto es Carnaval de Cádiz
y si aquí canta el pueblo
no lo olividemos nunca compañeros
pues somos la voz del que están en gallinero
no del que está en palco municipal.
Francisco Javier Díaz Quintana
‘Los pacientes’ – 2020