Antes de poner nada y para que nadie malinterprete este post, he de decir que los Hermanos Alcántara siempre me han encantado y los he considerado como autores de los grandes dentro de esta fiesta.
Realizada esta puntualización, el siguiente post trata sobre un leimotiv, una repetición de temas que es algo constante en las comparsas de estos hermanos, una crítica por no sentirse lo suficientemente valorados y casi no pasar nunca de semifinales. Y un remordimiento hacia dos autores: Antonio Martin y Antonio Martínez Ares, por encumbrarlos el público y, según ellos, no escuchar a ninguna otra comparsa más.

Como muestras os traemos 5 pasodobles:

1995 Taller de melodías “Con mi ilusión no acabarán”.

Con mi ilusión,
no acabará en la vida
esos veteranos que me han ignorado.
Con mi ilusión,
no habrá antifaz de oro
que me parta el alma
por darme de lao.
Miren,
tengo mis seguidores
aunque sean cuatro gatos
ya tengo basante.
Miren,
son personas honestas
que cuando me equivoco
me dicen las cosas por delante.
Que ya esta bién de marginar
cuando se escucha
una comparsa de chavales.
Si pa cantarle
a mi Cai del alma
yo creo que no importan las edades,
si somos torpe al interpretar
como se dice,
muchos veteranos tienen el título de aprendices.
Nos debeis de apoyar
y enseñarnos como buenos maestros
que en el carnaval
tambien la cantera es asunto vuestro.
Si nos merecemos el aplauso y el reconocimiento
el por qué vais diciendo que para un premio
tendremos tiempo.
No jugar con nuestras ilusiones.
que la vida sigue en la trama del tiempo
que ustedes ya sois el pasado glorioso
y el carnaval, el futuro nuestro.

1997 El mentidero “Me he dado cuenta”

Me he dado cuenta
lo dificil que es cantar
siendo profeta
dentro de nuestra ciudad.
Ya Paco Alba lo dijo
en una ocasión:
“en la provincia yo encontré
ese cariño que no sé
por qué se empeñan
en negar los gaditanos”.
No entiendo por qué existe
una afición para dos
si todo el mundo
pone el corazón.
Es lamentable que en la final
existan dos plazas reservá
y aqui hay más gente
que ya se merece ser reconocios
que unos ensayos
todos sabemos cumplirlos.
Por lo visto aqui hace falta
ser un buen samaritano
para sacar entradas en las taquillas
o tener amiguetes en el jurado.
La radio te levanta o te puede hundir,
hay quien le falta otra en su trabajo,
pero a pesar de ello tengo mi voz
sin traer mas mafia que una canción.
Si la prensa se empeña en cuestionar
todo lo bueno de nuestro repertorio,
yo no discuto quien le hace un cuplé
a fulanito de tal.
Somos caballeros
que no nos vendemos por una final.

1999 los negritos musicales “puñales, parecen puñales”

Puñales, parecen puñales que llegan al alma,
puñales que van disfrazados
con una sonrisa traicionera y falsa.
Hoy me van calando lentamente
mientras yo me encierro en mi cantinela,
y voy muriendo de celos
cuando mi trabajo no vale la pena,
no entiendo que haya una cultura maltratada así.
Siempre pensé que en el Falla,
darían aplausos sinceros,
y que la gente sólo iba,
para escuchar todo lo bueno.
Pero he podido vivir,
que el pueblo suele acudir
para animar dos comparsas,
esto se ha cantado aquí,
y esa es la pura verdad.
Y es que no puedo pensar
que con Antonio Martín,
peleando codo a codo
junto con Martínez Ares,
acabe aquí, mi Carnaval.
Hay mucha gente señores,
que sacrifican su casa,
y si no quieren darle un premio
no negarle unos aplausos,
que además no cuestan nada.
A dónde está esa afición,
que alardea en Carnaval,
si para ellos sobramos todos los demás.

2000 La maquinaria “el que fuera aquel negrito bueno”

El que fuera aquel negrito bueno
al que no me querían
unos lagrimillas le tiñeron
mi oscuridad.
Hoy he vuelto a este concurso ingrato
por cantarle a Cai
y quizás para aguantar de nuevo
la misma final.
No me importa que me digan
que no se puede venir llorando,
yo digo mis verdades
porque me duelen los desengaños.
Yo puedo respetar ciertas decisiones
pero es que veo que aqui ya no hay cojones
a la hora de votar.
Hoy se miran los nombres de ciertos autores
que no se equivocan en el carnaval,
por lo visto seremos los tontos de siempre
los que no acertamos.
Y yo quiero decir
a los que estais ahí
que esto es un sinvivir
que para ser jurado hay que ser más honrado.
Yo no pido un premio por la cara
ni siento desprecio
por esos compañeros
que para mi tienen toda mi amistad,
yo solo me defiendo y pido mis derechos
y aunque no tenga un premio sé felicitar.
Yo ya tengo la llave
que abre las puertas de los infiernos
y juro que es ingrato
porque alli se queman todos mis esfuerzos.
Al menos tengo la playa
de donde se encuentra mi gente
aplaudiendo con fuerza
sin más revanchismo de mierda.
Para ellos van mis letras y mis sacrificios
en esta guerra, en esta guerra.

2004 Egipto “carnaval, ya tiene un circo”

Carnaval, ya tiene un circo el carnaval
para reir, también para llorar.
El carnaval de los payasos que se burlan
casi siempre por detrás
a través de una radio
el que tira la puiedra
pa joder a los demás
y luego esconden la mano,
esos que van martirizando,
presuntos esmayaos, presuntos esmayaos,
que aún siguen jugando
sin importarles el daño.
Manos que van por detrás
que vienen por detrás
de aquellos magos que manipulan los sueños.
Gente que no escuchan na,
que no escuchan de na,
luego, hasta quieren opinar
luego, estos serán los artistas
de este circo del que a mi me da hasta miedo.
Encima tengo que escuchar
que esto ya no es lo mismo
solo porque hayan faltao
dos de las mejores plumas
con casi el mismo apellido.
No se puede olvidar
que aunque sean los mejores
esto aqui no se ha perdio.
Quizás no estemos los que son
en este circo de la suerte
pero de lo que yo me alegro
ellos se han buscado su bienestar,
y aqui estamos los que estamos
lo que ocurre es que aqui sobran domadores
de estas fieras en este circo
que ponen sus letras, pa bien o pa mal,
con dos cojones.