A mi tango no le importa que no lo cuiden,
a mi tango no le importa ser uno más,
tampoco le importa, dice, ser el primero
ni ganar tanto dinero como ganan los demás.
Mi tango no tiene celos del tres por cuatro
y no necesita voces para triunfar,
mi tango no da prestigio ni da la fama
porque sale de gargantas que no cantan pa ganar.
Y que le importa a mi tango
que no lo llamen ni pa un contrato
si es que mi tango a nacío
como decían para bailarlo
y es que mi tango tan solo
es feliz cuando lo escuchan
los buenos aficionados
que lo sienten de verdad.
Que mi tango jamás
por la fama cambiará
ole y ole ver bailando mi paisana.
Que mi tango jamás
se podrá acomparsar
pa que pueda ser vendido por toa España.
Que mi tango se conforma
con que le lleves el compás
aunque se lleve to el año
sin sonar ni una vez más.
Que a mi tango no le importa
vivir solo en carnaval
porque tiene como amante
la bandurria y la guitarra
que no tienen los demás,
que no tienen los demás.
Fernando Migueles Santander
‘Comediantes’ – 2006
