La sesión del 17 de enero la abrió el coro de Kiko Zamora, fijo últimamente en cuartos de final, que demostró seguir adelante con su estilo clásico, haciendo las delicias de los fieles a su grupo. Tras ellos llegó la chirigota ‘Las del convento de Santa María la Yerbuena’ con algunos golpes muy buenos y una bajada de telón apoteósica, buen pase, sí señor. La comparsa de Valdivia y Ramoni de los Ríos no logró conectar con el grupo con la idea de gaditanos exiliados. Sentido homenaje a José Antonio Valdivia, recientemente fallecido. Veo difícil su pase a la siguiente fase. El cuarteto de los niños, esta vez sin Iván ni Carlitos salió a escena y demostró que ellos se valen solos, ya que lanzaron al respetable una parodia genial, calidad que decayó en cuplés y popurrí. Este año la modalidad de cuartetos viene fuerte. La comparsa la pasarela hizo un papel digno y poco más. Y llegó la chirigota del Bizcocho, la que todos estaban esperando, vendedores de la playa. Humor negro a raudales en todo el repertorio con un público entregado que celebraba cada copla como si esta tuviera más calidad de la que poseía. Buen estreno de todas formas. Para terminar, de nuevo vuelve a dejar un buen sabor de boca la comparsa de Conil, habrá que darles ya su merecido pase.

Vuelve a ver cada actuación de nuevo:

En este primer lunes de concurso la sesión también tuvo un poco de todo, pero bastante mejor calidad que en otras anteriores. Las agrupaciones que mostraron muy poco nivel fueron el coro de Longobardo (quién diría que este hombre tiene un primer premio) que dejó un repertorio pobre con una interpretación aún peor; y la chirigota ‘Los maniáticos’ que, al menos le echaron ganas.
La noche empezó a despuntar con la comparsa de Fran Quintana que da un salto de calidad, especialmente con las letras de pasodoble, que fueron realmente buenas ambas. El grupo sigue sonando a las mil maravillas y la comparsa esta madurando a pasos agigantados. El efecto de esta comparsa hace que el cuarteto de Antonio Rivas y Zambrano caiga de pie, aunque en un principio haya costado. El personaje del Impaciente es quien hace reír al público, con un estilo muy parecido al de Javi Aguilera, seguramente los volveremos a ver una vez más por aquí, si no es así, al menos ellos y el público han disfrutado. Tras ellos el primer plato fuerte, la renovada comparsa de Los Carapapas, más dulce que en anteriores ocasiones, una idea que se desarrolla en presentación y popurrí y que continúa en su dulzura en el resto de composiciones. A la espera de mejores letras, han dejado un gran sabor de boca. La que no ha entrado con muy buen pie es la chirigota del Vera que cambia su apuesta y parece ser que el repertorio dejó con ganas de más. Pasodobles distintos que no cuajaron y cuplés para que no se les puntúe tampoco ayudaron a que la primera impresión fuera mejor. El popurrí sí que eleva el nivel, seguro que en pases posteriores estarán compitiendo de mejor forma. Discreta, aunque decente la comparsa de Andy que canta mejor que en el pasado concurso, pero que, al menos, parece ser que no va a alcanzar la siguiente fase (salvo sorpresa).

Vuelve a ver todas las actuaciones de nuevo: