A la oficina del paro fui a ver si me colocaban
t me ha atendido una muchacha, INEM se llamaba, ¿Inem?
Sería la dueña de aquello
porque vi que su nombre estaba puesto
mu grande en la fachada.
Búsqueme usted un trabajito,
me dijo INEM que quedaba un puesto de camarero.
Yo es que no acepto propina,
INEM te soy sincero.
Entonces me dijo
a usted le vendría muy bien
trabajar en cama.
Un trabajo en la cama, qué maravilla
pero, qué corte, la cama era
un pueblo de Sevilla.
Le podemos dar un cursillo de torero,
eso está bien porque ganaría mucho dinero,
no me da miedo el toro
me da más miedo tener que darle la vuelta al ruedo.
También tenemos un puesto de barbero,
me lo pensé y no dije sí, yo por los pelos.
Inem, déjelo ya hoy no es mi día
me cachi en la mare que este mundo me trajo
y me fui pa mi casa cabizbajo,
hay que ver cómo está de chungo el trabajo.
José Manuel Cornejo, Luis María Rodríguez y José Luis Ballestero
‘Los Juancojones’ – 1998