Hoy me arremango la chilaba
desde un balcón del Mentidero
al que tú le cantabas
uno de esos febreros
suspirando por Cádiz
mucha gente aquí hay
que te está echando de menos.
Déjame que te diga coplero
que como el primero yo me aproveché
de tu fama de hacer pasodobles
basados en tragedias
pero quiero que sepas maestro
que yo con tus coplas siempre disfruté
y que sigo escuchando al orfebre
o a aquel pulchinela.
Joaquín de don Ramón,
Joaquín de mi afición,
Joaquín sencillo y compañero,
caballero ante tanto cajonazo
Joaquín que comprendió
y que reconoció
que su cabeza necesitaba un descanso.
Digo yo, querido Juaqui,
si por cajonazo fuera
tú ya hubieras hecho en Cai
seis comparsas callejeras.
Te niegan el baluarte,
es algo que clama al cielo,
y ya están llegando tarde
para hacerte pregonero
poeta de la alameda,
solamente me queda
quitarme el sombrero,
quitarme el sombrero,
quitarme el sombrero.
Moisés Camacho Ortega, José Manuel Sánchez Reyes y José María Barranco Cabrera
‘Hoy no me puedo levantar’, 2014