Su máquina de coser,
la vieja lámpara en la salita,
temprano se hace un café
que toma rápido en la cocina,
no hay tiempo pa descansar,
solo una pausa para almorzar.
El hilo da una puntá,
recorta y ya hay otra más
la tela no va a faltar,
la saca de ropa usá,
de la funda de un sofá,
de las camisas que iba a tirar.
Van pasando las horas
y le van doliendo sus viejas manos,
y ella tira palante
que es su manera de demostrar
que esta batalla tiene un solo enemigo
y le sobran los motivos
pa plantarse y pa luchar
que esta noche tiene que entregar
otro lote que debe acabar
vienen a recogerlo
a su casapuerta
para llevárselo al hospital.
Y en una vieja radio
sobre una caja que va sonando
en donde dan las noticias
que hacen que siga sin un descanso.
Cómo muere la gente
y cómo abandonan a los ancianos
y cómo no hay mascarillas
en los hospitales sigue escuchando.
Mira por su ventana
y ve en su mosaico a su Nazareno.
“Dame fuerzas, pare bueno,
que aunque siga aquí encerrá
estoy lista pa pelear,
yo tan solo pido ayudar
a cada vecino, a los asilos, al hospital”.
Y esta historia que yo he vivido
se repitió más de lo que piensas
sin dinero y sin comisiones de la nobleza.
Que la gente más pobre
que la gente más pobre hizo mascarillas
mientras robaban a manos llenas los sinvergüenzas.
David Fernández, Antonio Rodríguez, José Manuel Pedrosa y Raúl Rodríguez
‘Los babeta’ – 2022