Mi pasodoble fresco como un manantial
salpicadito de la brisa de los mares
vengo a cantarte con compás de carnaval
a mi bendita tierra donde me parió mi mare.
Hoy yo te ofrezco un cantarito de cariño
si me regalas tu salada claridad
y pongo el corazón, mi vida y mi verdad
y pongo el alma entera cuando entono mi cantar.
Ay, Taza de Plaza,
traigo mi agüita fresca
para que tú la pruebes
dime quién quiere un vasito,
dime quién quiere la nieve.
Ay, ay, llévame por tus calles,
déjame que pregone
por la Plaza de las flores,
por Cruz Verde y callejones.
Yo te traigo
de la sierra un cantarito de alegría,
te lo cambio por la sal de tu bahía,
por la arena y por la espuma de tu mar.
Bebe mi agüita fresca, bebe mi agüita pura
que yo moriré bebiendo coplas de tu carnaval.
Antonio Álvarez, Francisco José Rosado y Antonio Guerrero
‘Al agüita fresca’ – 1992