Existe una casa en Cádiz
tan grande como un palacio
que guarda junto a sus muros
el alma del gaditano.
Una casa mu antigua
donde se oye como un sueño
Cañamaque, Barbieri
y los palos del flamenco,
una casa que un día
el fuego ya devoró
pero han reconstruido
de piedra y madera
su gran corazón.
Es una casa de aspecto moro
que abre tres puertas
que son tres tesoros
son coloraos su ladrillitos
y como el cielo
de su techo el paraíso.
Desde la plaza Fragela
mira al mundo su bella fachada
el suelo lleno de estrellas
que ese es nuestro paseo de la fama
dentro se aloja mi gente
en noches de pura magia
nervios en los camerinos,
las tablas, los gritos,
que viva mi casa
y quien le arranque sus piedras
es solo un mierda
que no se entera
qué significa el Teatro Falla.
Francisco Martínez Mora
Tango se escribe con tiza (2019)