El Canijo reedita el ‘pelotazo’ de ‘La gaditana’ cien años después

Montevideo no había acogido nunca a una chirigota de Cádiz como tal. Cien años después de que ‘La gaditana’ trajera a la capital uruguaya el ADN de la murga montevideana actual, otra generación de chirigoteros dejó la impronta de las coplas gaditanas coincidiendo con el I Encuentro de Carnavales Iberoamericanos. La chirigota ‘Las muchachas del congelao’ llenó en la noche del miércoles el bar Trasbambalinas ante un público numeroso y picado por la curiosidad de conocer qué es lo que se gesta en Cádiz de septiembre a febrero. La agrupación de Antonio Pedro Serrano ‘El Canijo’, en su debut ante los uruguayos, completó una magnífica actuación didáctica, por cuanto su autor explicó las peculiaridades de la modalidad de chirigotas y algunos de los temas tratados para que el auditorio entendiera mejor al grupo.

Y resultó ser una clase magistral para un público que lo pasó en grande participando de una actuación interactiva. Pareció la actuación en una peña gaditana con un ambiente por todo lo alto. Local cerrado, complicidad, ganas de Carnaval, risas, emoción…. Hubo lugar para todo. El pasodoble contra Pinochet, correspondiente al repertorio de ‘Los Juan Palómez…’, hizo saltar de sus asientos al público, sobre todo a la delegación chilena, que aplaudía ya en mitad de la copla. El mismo sentimiento transmitieron los chirigoteros con el pasodoble dedicado a conflicto de Palestina o el que en 2005, con ‘Los que salimos por gusto’, criticaba la gestión de George Bush.

“Si no participa la gente en el estribillo, nos vamos a Argentina”, señaló El Canijo sabedor del pique histórico entre el Uruguay y el país de Maradona. Logró sacar a uruguayos para que en el estribillo besaran en la boca a las princesas y se mostró como un gran dominador de la escena. La chirigota tuvo habilidad para adaptarse al medio sustituyendo la palabra ‘Peñarol’ por ‘Cádiz’ en un cuplé en el que se hacía mención al sufrimiento que el equipo amarillo provoca a su hinchada. Y resultó oportuno el cambio teniendo en cuenta que el Peñarol no pasa ahora por su mejor momento.

Las coplas de contenido sexual provocaron grandes carcajadas y expresiones de asombro, dado que por ‘acá’ estos temas no son tratados tan directamente. Los uruguayos entendieron los mensajes picantes, será porque el lenguaje del sexo es universal. El popurrí de ‘Los que salimos por gusto’, que cuenta la vida de un espermatozoide hasta el momento de su salida al exterior, fue muy celebrado por los espectadores.

Las princesas de El Canijo estuvieron arropadas por carnavaleros de gran enjundia en Montevideo como los hermanos Cardozo (Tabaré y Yamandú) y Carlitos Soto, uno de los letristas más veteranos y laureados de la murga montevideano. Medios de comunicación locales cubrieron el evento. El espíritu de ‘La gaditana’ regresó para demostrar que cien años después los vínculos están intactos.