Lo que yo más quiero en este mundo es mi marío,
que me muera yo que sí.
Yo soy la que más comprende
sus virtudes y sus defectos.
Cuando está de buenas es un peacito de pan,
y cuando se enfada es un peazo sieso.
Qué mal, qué mal rato pa almorzar,
pues mi marío pone los documentales
esos que echan de animales
por la Segunda Cadena
y mientras yo como pijotas
una lagartija en la tele se come,
se come, se come, se come, se come,
se come una cucaracha muerta.
Se tiene que lavar la boca
la que hable de mi marío,
él siempre ha sío un hombre honrao,
incluso trabajador,
y si ahora lleva cuatro años
dao de baja no es por gusto,
es porque tiene alergia
a todas las herramientas,
y cuando coge un martillo
le salen barrillos hasta en el reloj.
Se hizo la vasectomía,
y ahora en el alma nos pesa,
por lo visto hubo un fallo
durante la operación
y ya van pa quince años
que no levanta cabeza.
José Luis García Cossío
‘Las Marujas’ – 1996