he preparado un nuevo conjuro en mi caldero
con el embrujo que aprendí de Paco Alba
y los encantos de los compases chirigoteros,
de la Caleta me llevé todo el hechizo
“pa” que le diera el saborcito de la mar y los erizos
y del barrio de la Viña, como no,
de la Virgen de la Palma, una oración,
y del cielo su permiso ¡Ay!, del barrio Santa María,
un cante por alegrías, de un rincón, del Mentidero
los versos que te escribía, Gitanilla del Carmelo
¡Ay! ¡Ay! ¡Ay! Mi “Cai” tan vieja y tan niña,
pídeme tu sin parar, que para eso aquí están,
con sus varitas tus hadas madrinas
“Pa” aliviarte con su magia las penitas
y verte siempre bonita “Cai” de mi corazón
mi niña, mi princesita.