Nos pedían el popurrí de “Los Clásicos Básicos” del año 2000 y aquí está:
Vuelve al Falla la orquesta de cámara,
vuelve al teatro la música clásica,
vuelven violines trombones y flautas,
y vuelve la melodía, vuelve la sinfonía,
vuelve la armonía…
y vuelve la comparsa del Puerto Santa María.
Prestadme atención
que voy a contar pa que sepa la gente
la gira que dimos por los continentes,
escúchame tú,
por los continentes y por el Bahía Sur.
Tocamos en Estados Unidos en la Casa Blanca,
llegamos y llamamos: “Clín-Ton”
y nos abrió Bill: “¿Qué pasa Bill??
¿Qué pasa picha mía?
aquí venimos a tocartre tres o cuatro sinfonías.
Y nos dijo: “Come Here”
y le dejamos la nevera vacía.
Hillary Clinton ni se lo creía
se quedó hecha polvo
pero ¿A quién se le ocurre decirle
“come here” al gordo?
Y allí en Moscú
¡qué frío más grande!, ¡qué barbaridad!
si cada vez que yo iba a mear
la picha temblando se echaba pa trás
y me decía: “no me vaya a toca
con esas manos tan frías”
Y estuvimos en más sitios y si lo quieren saber
uve doble, uve doble y me buscas en Internet
y punto es.
Aún recuerdo los años vividos
en el conservatorio
y aún recuerdo a mí profesor
que se llamaba George
o sea, Gregorio.
Y recuerdo aquella monjita
que siempre estaba sola
era igual que la que anuncia la Play Station
pero sin las dos bolas.
En su clase siempre se formaba
mucho pitorreo
nos juntábamos atrás cuatro o cinco
que con el cachondeo
le pusimos sor-feo.
Y recuerdo en la clase de canto
sentada a mi vera
a mi amiga Ani
que la probre quiso ser soprano
y era tan chiquitita
que se quedó en “Sopranis”.
El viaje de fin de carrera
que era a Suecia
y costaba un dinero
a la hora de poner dinero
como el viaje era a suecia
po yo me hice el sueco.
¿A quién se le ha ocurrío
esa idea tan grata
de poner elecciones
el domingo de piñata?
El día doce de marzo
mira tú que detalle
irte para votar
con un prapachín
con un pasacalle.
Y está mi obsesión
que tengo hasta pesadillas
soñé con las elecciones
catorce noches seguidas.
Porque aunque a tí no te lo parezca
son elecciones carnavalescas,
aunque a tí no te lo parezca
son elecciones carnavalescas.
Y soñé que votaba en el colegio del Corralón
y de presidente en la mesa estaba el Pepón
vestido de pierrot.
Y cuando fui a votar y me metí en la cabina
estaba to llena de papelillos, de botellones,
de serpentina, y una niña meando en la esquina.
Porque aunque a tí no te lo parezca
son elecciones carnavalescas,
aunque a tí no te lo parezca
son elecciones carnavalescas.
Yo me volví loco buscando la hojilla
y la que cojí fue para elegir
al mejor tenor, al mejor segunda y al mejor octavilla.
La gente en la calle yendo pa votar
se le oía cantar:
“Ay que casualidad, ahora tengo que votar
el gobierno no respeta ni que estamos en carnaval.
Ay que casualidad, ahora tengo que votar
el gobierno no respeta ni que estamos en carnava,
trian, trian, trian”
Para entrar en esta orquesta
tuvimos que hacer un examen
contestar a diez preguntas
y después poner el name.
Ay, el examen, ay, el examen
va a comenzar.
“A ver, dos filas
la fila A y la fila B.
Los de la B examen A
y los de la A examen B
¿Se habéis enterao o lo digo otra vez?”
“Dilo, dígalo”
“Fuera la A, fuera la B
fuera la A, fuera la B”
“Bueno da igual,
empezad ya
y si alguno tiene alguna chuletita por ahí
que se deje de rollos
y se acuerde de mí”
Ay, Don Fermín, ay, Don Fermín
la chuletita que te gusta a tí
Ay, Don Pepón, Don Pepón, Don Pepón
que te las pegas de tacón
Ay, Don Pepón, Don Pepón, Don Pepón
que te las pegas de tacón.
Llegó el dos mil
la chirigota un siglo
y al otro sobreviví.
Un siglo,
cien años que han llenado
la historia del carnaval
un siglo
desde la murga que hizo Cañamaque
murga de Paco Alba, de Agustín González.
Pero pa chirigotas las del Carota.
Oe, oa las de Agüillo y de Fletilla
oe, oa Juan Poce y Ricardo Villa
oe, oa y la de Eduardo Delgado
oe, oa Juan Rivero y San Fernando.
La chirigota del Yuyu, de Reyes
Manolo Santander, la de Jaime la Puente
y el Noly armando el taco con Ramón y Paco.
Oe, oa la del Petra y Carapalo
oe, oa Emilio y Paco Rosado
oe, oa la del Sheriff y la del Gómez
oe, oa la del Selu y la del Love.
Oe, oa la del Livi y la del Mario
oe, oa y también la de Juan Carlos.
Un siglo a cumplido ya
ojalá que cumpla muchos siglos más
juntos podemos lograr
que la chirigota cumpla muchos más.
José Manuel Valdés, David y Francisco Javier Márquez
“Los Clásicos Básicos” 2000