Nos lo pidió Cristo y aquí está el popurrí de “Los regaera”. Puede ser que tenga algunos fallos, pero éste es el popurrí:
De to los jardines que están en el mundo
hay uno bonito al filito del mar
sonido, colores y aromas profundos
frasquito de sal, frasquito de sal.
Pero tiene sus problemas
y a pesar de los inviernos
al torito de las penas
él lo coge por los cuernos.
Y como no llueve y está moribundo
lo voy a regar, lo voy a regar.
A mí me da igual que me llamen loco
si en mi cantar se me va el coco
y a fin de cuentas me sale bien
que puede ayudar con esa locura
que puede ayudar con esa locura
y mi sencilla literatura
pa que Cádiz no pierda el tren.
Ese tren que nos pasa por delante
y no se enteran los goberantes
que en nuestro Cádiz hay estación
y su alguna vez nos hemos subido
con el engaño vamos metidos
en el último vagón, en el último vagón.
El que rueda por las vías
de las ocho andalucías
pero todavía con carbón.
Si los barrios de mi tierra
se distinguen con olores
los perfumes hoy se alegran
porque Cádiz huele a flores.
Flores que de Cádiz no se mueven
y de Cádiz no se llevan
de la puntita del muelle
hasta la misma Alameda.
Clavel de Santa María pal Nazareno
la viña rosas al cristo por las ventanas
Y en el Pópulo sus lirios
y hasta el Mentidero bueno
y rodeando a mis barrios
violetas y nardos de las gaditanas.
Gaditanas que merecen mil jardines
mil jardines que te alumbren esa cara
donde vive tu sonrisa de clarines
ramillete de jazmines
pa las noches y pa las claras.
Gaditanas que merecen mil jardines…
Papapapapapa…
A quien le ataque a mi tierra señor
las murallitas le cierran
y por delante que me pongo yo
con mis tambores de guerra.
Nadie entra en mi fortín de colores
nadie entra si no nos viene con flores.
Papapapapapa…
Gaditanos por cada rincón
por cada puerta y tronera
Cádiz entero es un tirabuzón
contra las bombas de afuera.
Siembro, planto
Napoleón es vencío
y por lo tanto
Cádiz no tiene enemigos.
Papapapapapa…
Dónde está el cariño por mi tierra
cuando suenan las comparsas
y su amor por Cádiz se callan
Siempre más pendiente de la guerra
que del suelo de su casa
y en vez de coplas, batallas.
Y después de acuerdo
vamos acorde
con bordones de los torpes
pregonando que te quieren
y regando para afuera
de tus murallas.
Dónde está el cariño por mi tierra
al sembrar campos de piedras
donde debe estar la playa.
Perdona que me marche
perdona que me vaya
me está dando el levante
y la memoria ya me falla
por eso antes de irme
no dejo pa mañana
el piropo que tengo
pa mi flor más gaditana.
Dama de noche
de los gaditanos
que en los veranos
viene dando voces.
Dama de noche
como Campanilla
en las orillas del mar y la noche.
Dama de noche
que siempre que llega
por la Alameda
mi tierra perfuma.
Dama de noche
que a Cádiz le llena
con los aromas
que deja la luna.
Mi dama de noche…
Loco por Cádiz, loquito perdío
mi rinconcito el más marinero
por el que pierdo los cinco sentíos
es mi locura el jardín que más quiero.
Loco por Cádiz, que me tienes loco
y amarraíto pa siempre a tu vera
pasé mi vida sembrando piropos
y terminé como una regaera
una regaera…
Perdona que me marche
perdona que me vaya
como una regaera.
José Luis Bustelo Sánchez
“Los regaera” 2004
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