Hoy toca dar un paso atrás en mis palabras,
reconocer que en un tiempo al fin pasado
anduve irresponsable, frívolo y macarra,
coqueteando con las dulces garras
de los placeres más envenenados.
Hoy toca dar un paso atrás en mis canciones,
tragarme los cojones que eché sin mirar
y en este canto maldecirme
por las veces que en peligro fui
poniendo a tanta juventud
qué ignorante con la droga comenzaba
mientras yo alegre cantaba
como un tinto y un romano,
como un hippy y como un pantera
y quitándole hierro a esa fiera
de la que decía
que a su paso la muerte venía
danzando a la vera
Fueron tiempos de locura
en los que yo pensaba
que poco importaba
cuál fuera el camino
si el destino era la felicidad.
Ay, pobre idiota de quien
se machaca la sien
con veneno y fatiga
secando su manantial,
juventud que jamás
volverá repetida,
y si canto esta canción
es para pedir perdón
y abrir el corazón a la vida.
Y para ti si me estás escuchando
con tus veinte años llenos de ilusión,
oye lo que te digo yo
que le he vendido mi alma al diablo,
ahora que estás a tiempo de entenderlo,
ahora di que no,
que yo estoy vivo y de milagro.
Juan Carlos Aragón Becerra
‘Araka la kana’ – 2007