El perdón, pedir perdón,
quisiera pedir disculpas a esas mujeres
que ha molestado mi instinto de varón.
Su perdón, de corazón
por tantas y tantas veces
que algún piropo le dije al paso
soltando babas perdiendo la noción.
Perdonen, les pido que me perdonen
por tantos chistes, chistes machistas
haciendo el payaso,
tantos agravios y letras con burlas
que les canté en el pasado,
tantos discursos en alto
para indicar que un macho
siempre lleva razón.
Pido perdón por las muecas
y esas bromas pesadas
que hiciera con mofa
sobre sus arrugas,
quiero su perdón por decirles
que eran las reprimidas o mal folladas
o que mi suegra fuera una bruja.
Pido perdón por las veces que me sorprendió
ver a mujeres llegando más lejos que yo,
por creer que en la pareja
la casa es de la hembra
y el hombre era el más fuerte.
Te pido me ayudes para encontrar la salida
de aquella cueva que un día
mi padre la fuese a ocupar
donde antes estaba mi abuelo,
ay, después de mi bisabuelo
que no quiero que mis hijos
sigan los pasos de un neandertal.
Fernando Migueles Santander, Inés Migueles Pájaro
‘Asesinato en el Cádiz exprés’ – 2024