Agustín González Chimenea falleció ayer a los 79 años de edad, según comunicó su familia a última hora de la noche de ayer. La hora del entierro se conocerá hoy viernes. Había nacido en pleno barrio de Santa María.
Con la muerte del Chimenea, el Carnaval pierde a una de sus grandes figuras, un clásico reconocido por el conjunto de este mundo, que él supo pregonar con maestría y profundo cariño en el año 2000.
Su medio siglo de dedicación a la fiesta ha dado mucho de sí, especialmente en los duros años de la censura en las décadas de los sesenta y setenta. Autor de chirigotas también escribió para comparsas, coros y cuartetos e incluso recorrió las calles con su particular romancero, especialidad a la que dedicó especialmente sus últimos años. Llegó a publicar también un libro, Anecdotario del Carnaval gaditano.
Su primera agrupación data de 1950, ‘Los nuevos ricos’, que obtuvo el quinto premio; un año antes había sacado la murga ‘Estampas gaditanas’. ‘Los lápices de colores’, ‘Los Pitirolos’ y ‘Los Tunos Tunantes’ fueron primeros premios en el Falla. Durante toda su vida estuvo estrechamente ligado al mundo de las peñas.