Con los nudillos de una mano apoyados en una mesa de la peña ‘Los cazadores’ y con la otra marcando el compás de uno de sus pasodobles. No atinamos a recordarlo. Da igual. Todos son buenos. Los de lo chirigotas y los de comparsas. El veneno del Carnaval le está ganando la batalla. Quiere volver y tiene que volver. A Manuel Sánchez Alba le espera demasiada gente y, de momento, no piensa defraudarles. Salvo contratiempo, en 2014 le veremos sobre las tablas del Falla aunque él nunca se suba porque su chirigota siempre será la del Noly. Escriba quien escriba las letras y las cante luego quien las cante.
-¿Vuelve el Noly al Carnaval?
-Es más que posible. Me lo estoy planteando seriamente. Pueden pasar muchas cosas y es demasiado pronto para asegurarlo con rotundidad. Pero casi con toda seguridad.
-Suponemos que ilusionado
-Siempre lo estoy desde el año 1984 más allá de que haya estado un tiempo alejado. La ilusión no la he perdido nunca. Si me implico lo haré con todas las consecuencias.
-¿Qué le ha llevado a decidirse?
-La ilusión de la que te hablo. Adoro el Carnaval. En cuanto me planteo la posibilidad de escribir una agrupación rápidamente comienzo a ilusionarme. A partir de entonces como dicen los curas fe, esperanza y caridad.
-¿Le ha costado mucho dar el paso?
Sí, es evidente. Durante mucho tiempo me he convertido en una mariposa que revoloteaba de aquí para allá. No solo en el Carnaval también en mi vida. Ahora, estoy más asentado. Aún así siempre cuesta decidirse. Volver al Carnaval significa mucho y más para mi que me considero un viñero de verdad, no un viñero postizo como otros. Yo soy un viñero de portería de Capuchinos número 5. Hay muchos viñeros que se vanaglorian de que son del barrio y no lo son. Pese a costarme dar el paso es verdad que me lo he planteado todos los días porque el Carnaval es algo que vive en mi pese a llevar 34 años y haber recibido todas las distinciones de la fiesta.
-¿Es importante el paso entonces?
-El paso no es importante importante son los penitentes.
-¿Tiene la idea pensada?
-Claro que la tengo pensada pero no te lo puedo decir. Es muy temprano. Como tenerla la tengo igual que tengo rizos en la cabeza.
-¿El estilo el de siempre imaginamos?
-Ufff. El debate del estilo. Los estilos solo lo determinan los músicos. Si no llevas una determinada música no puedes decir que lleves un estilo clásico. La música deterrmina los estilos. Es muy fácil escribir un pasodoble hablado como hace el príncipe de la chirigota José Luis García Cossío. Eso sí, la chirigota clásica no muere siempre perdura porque siempre se canta sea de ahora o de hace 40 años.
-¿Y el grupo?
Ahí andamos.
-¿Habrá gente que quiera salir con usted?
-Salimos ahora a la calle y aparecen 20.000 personas.
¿Hay muchos aficionados que esperan con ganas su regreso?
-En cierto modo sí y me da miedo también. Gente que le gusta lo que yo hago y en cierto modo se puede llevar un chasco aunque la gente que me espera va a tener lo que espera. Tendrán lo que saben que tendrán.
-¿Siempre le han respondido los grupos?
-En todo momento. Lo que sí tengo claro es que no voy a crear una familia voy a crear una chirigota. No hay que confundir la amistad con juntarse para cantar en el Falla. Estoy orgulloso de los grupos que han defendido mis repertorios.
-¿Y los letristas?
-Prefiero no hablar.
¿Hay chirigotas clásicas en la actualidad?
-La chirigota clásica en este momento no está. Depende de la música del pasodoble, el estilo y hasta los tipos. Hay veces que ves una tela de un tipo y ya sabes que estás ante una chirigota clásica. Pero es muy díficil hacerla. Ahora, cuando suena de verdad no hay quien pueda con ella.
-¿Y el estado del Concurso?
-Está bien organizado. Decir lo contrario sería mentir. Solo una mejora. Creo que debería haber cuatro agrupaciones en la final.
-¿Qué me dice del público?
-Hace falta menos fanatismo y más afición. Antes para levantar el Falla tenías que poner chinchetas en el culo a la gente. Hoy todo el mundo se levanta con cualquiera. Si alguien dice “Juan Carlos I es el mejor” se le aplaude y si luego alguien dice “Juan Carlos I es el peor” tambíen se le aplaude. Puede que incluso hasta más fuerte.
-¿Cree que su presumible vuelta puede animar a otros autores “clásicos”?
-Te vuelvo a decir que no hay autores clásicos porque hay muy pocos músicos clásicos. Te pongo el ejemplo de Manolo Santander. Nunca ha sido un clásico porque nunca ha escrito música. Bueno ni clásico, ni viñero. El chirigotero clásico y viñero es el que crea no el que presume.
-Vaya epitafio. Ahí quedó eso. ¿Nos vemos en el Falla?
-Ya veremos
Francisco Márquez, Universo Gaditano