Para ti que cargas con la cruz
de ser bayeta y chacha,
una fregona no tiene el glamour
de bata y sanidad,
porque tus manos
reventás de química
tan destrozadas
no han sido dignas de agradecimiento
de una sociedad.
Acomplejada
no solo el rico humilla al pobre
es más atrocidad
si ese puñal es de un igual
en tu trabajo
te crees que es superior
usar portátil a un estropajo.
Tú que has sido nuestro escudo
en el vacío incierto
quién protege tus derechos
y vuestra dignidad
sin mascarillas, sin EPIs, pisadas por la patronal.
Eternas gracias
tú siempre fuiste indispensable
pero por mucho más de lo que hiciste
en el hospital,
casas y hoteles
oficio por decreto
que es exclusivo para mujeres.
Mujeres que fregando levantaron un país
levaron tu casa, tu porvenir
y que hoy son el orgullo
porque son la derrota
del clasismo a esas trabajadoras
cuando un universitario, empresarias y obreros
presumen de ser primero
hijos de una limpiadora.
Germán García Rendón
‘Los conquistadores’ – 2022