Es increíble
lo que la ciencia
está consiguiendo,
lo que era un sueño
va siendo cierto,
cómo una simple
gota de sangre
guarda la llave
de procrear.
Que las especies
que ya se extinguieron
en nuestro planeta
nuevamente puedan
repoblar la Tierra
dentro de algún tiempo
se hará realidad.
Lo que hubiese dao por picarles
antes de que se nos marchasen
a Fletilla, don Paco Alba
y a Cañamaque, a Cañamaque.
Lo que hubiese dao por picarles
y tener una gota de sangre
del Carota, Agüillo, Quirós,
la del Selu y Jesús Monzón,
la del Sopa y, cómo no,
la del Masa y el Peña
pa guardarlas como un tesoro
cerquita de mi corazón
y cuando la ciencia quisiera,
señores, quisiera,
de mí la sangre cogiera
para que todos estos monstruos
estos grandes monstruos,
nacieran, de nuevo nacieran.
Juan Manuel Braza Benítez
‘El escuadrón de los jartibles’ – 2010