El Carnaval ha sido la novena candidatura más votada de las 45 que optaban al reconocimiento. Los españoles emitieron 152.911 votos desde todas las provincias y ciudades autónomas de España
El Carnaval de Cádiz recibió 7.104 votos, siendo superado por la Semana Grande de Bilbao, con 14.027 votos, el Filandón de León (12.687), el Camino de Santiago (11.893), la Procesión de la Virgen de la Salud de la localidad valenciana de Algemesí (10.327), la Leyenda de los amantes de Teruel (9.771), las Fallas de Valencia (8.798), la Tradición de la Virgen del Pilar de Zaragoza (8.489), la Leyenda del Lagarto de la Malena de Jaén (8.117). En décimo lugar ha quedado la Bienal de Flamenco de Sevilla, que ha logrado 6.881 votos.
En total, los españoles emitieron 152.911 votos desde todas las provincias y ciudades autónomas de España, y también se recibieron votos de ciudadanos españoles residentes en el exterior.
Difundir el patrimonio
El presidente del Bureau Internacional de Capitales Culturales, Xavier Tudela, declaró que la elección de los diez Tesoros del Patrimonio Cultural Inmaterial de España “ha permitido conocer mejor este rico y extenso patrimonio”. “Entre todos hemos puesto en nuevo valor el patrimonio inmaterial”, subrayó.
La campaña para seleccionar los 10 tesoros se llevó a cabo con la voluntad de promover, divulgar, sensibilizar y salvaguardar el rico patrimonio cultural inmaterial español. El patrimonio cultural inmaterial se define, según la Convención para la protección del patrimonio inmaterial de la Unesco, como los usos, representaciones, expresiones, conocimientos y técnicas que las comunidades, los grupos y, en algunos casos, los individuos reconocen como parte integrante de su patrimonio cultural.
Algunas de sus características son que se transmite de generación en generación; es recreado constantemente por las comunidades y grupos en función de su entorno, su interacción con la naturaleza y su historia; infunde a las comunidades y los grupos un sentimiento de identidad y de continuidad; promueve el respeto de la diversidad cultural y la creatividad humana; es compatible con los instrumentos internacionales de derechos humanos existentes; cumple los imperativos de respeto mutuo entre comunidades, grupos e individuos y de desarrollo sostenible.