Los pasados carnavales
al presidente González
le dieron un buen consejo,
que llevara con decencia
y con honor la presidencia
si quería llegar a viejo.
El poder corrompe al mundo
y convierte en un segundo
en malvado al hombre bueno,
al honrao un escaño lo pervierte
y a los perritos de siempre
le ponen collares nuevos.
No entiendo cómo se juega
con las medidas y presupuestos,
comprendo que no es mi pena
pero ya afectan tantos impuestos.
Si quieres que te respeten
no aprietes tanto nuestro cinturón.
No voy a acusarte
de que las botas te estés poniendo
pero sí que estás haciendo
políticas de cañón.
No te olvides nunca
que los obreros somos civiles,
no queremos más misiles
la cantidad de armamento
no es necesaria
para medir el progreso en la nación.
Francisco José Rosado Rodríguez, Manuel Rocha Cendón, Juan Romero Quirós, Emilio Rosado Rodríguez y José Manuel Gómez Sánchez
‘Los llaveros solitarios’ – 1984